Época: Pedro a los 13 años.
Escenario: En una larga carretera. El paisaje es desértico y montañoso.
Narración: “De excursión con sus padres, explorando las tierras locales”.
Escena 1: Los padres no parecen muy contentos, no se hablan. Pedro mira por la ventana.
Escena 2: Se ve de frente a Pedro, con los ojos perdidos en el horizonte.
Escena 3: Se ve a Pedro desde atrás. Pedro ve a Rígon corriendo velozmente, saltando de un poste al otro, de una montaña a la otra, sobre pancartas y puentes, esquivando, contraatacando, utilizando los elementos que tiene a la mano para defenderse.
Escena 4: Un túnel obstruye la vista. A la salida, Pedro ya no lo ve.
Escena 5: La madre nota que Pedro está mirando muy atentamente por la ventana. Pero cuando mira a donde mira Pedro, no ve nada. Esto siempre pasa.
Madre: “¿Estás bien hijo? ¿Qué miras?” Pedro: “Nada mamá, ya no está…”
Época: Pedro a los 13 años.
Escenario: La sala de espera de un hospital.
Narración: “Pedro ve a Rígon en su lucha. Es su inspiración”.
Escena 1: Pedro, visto de frente, mirando atentamente por una ventana del hospital.
Escena 2: En un lugar vacío (sin gente), Pedro ve a Rígon luchando contra un verdugo ciborg. Rígon está en dificultades.
Escena 3: Justo cuando el Verdugo va a clavarle el hacha, la doctora llama a Pedro.
Cuando regresa a ver, ambos desaparecieron.
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